miércoles, 14 de mayo de 2008



Nadie posó su mano en él
no contempló benévola la mirada
el pasado de ayer hoy ilusorio
grito que te pierdes desde el pecho
gélido hilo de dolor, casi imperceptible.
Errante
pálida luz interior
¿quién se zafa de tus cadenas sutiles?
¿quién es aquel que logra seducirte?
Implacable destino.

4 comentarios:

F e r n a n d o dijo...

Oh Fortuna!
Como la luna, eres tan variable!

(Carmina Burana).

Me hiciste recordar a esta obra fabulosa de Carl Orff, que tuve el placer de cantar seis veces en coro masivo, increíble trabajo.

Y el destino y sus hilos, y nosotros que siempre esperamos lo bueno. Cuando se hace demasiado silencio, uno desespera y manotea lo que sea.

Saber esperar, el destino y sus juegos cómo cansa a veces no?.

Hermoso y concreto, loco!
Gracias..-

Y te pasaste con tus buenos deseos, gracias por el tiempo y seguí pintando, pinta para vos y luego escaneanos las cosas, dale?

Hoy hablaba con mi hermana hace minutos, le dije que la gente que se acerca a uno es indicadora de como vamos evolucionando, y la verdad que siento que estoy creciendo para bien, sos un indicador también.

Abrazo y buenas noches amigo!
Fernando.-

Anónimo dijo...

Que bello poema leí por aquí. Sinceramente me gustó tu forma, tu color, tu calor y tu armonía en tus letras; seguro fue el destino que me llevó hasta aquí para poder conocerte y deleitarme con tan lidas letras.

Un placer haberte conocido, llegué desde el blog de Fernado, que para mí fue un descubrimiento total. Espero y deseo; hablando de deseos... poder recibirte por mi espacio, será un honor hacerlo.

Besos tiernos y dulces para ti.


** MARÍA **

El Humanista dijo...

fer:
me copa mal Carmina Burana, y no te puedo creer que seas o hayas sido parte de un coro.... aca tenes a un barítono bajo que siempre quiso ser tenor (asi soy yo jajaaja quiero cielo porque vivo en la tierra y en el cielo que dios me aguante)

María
Guapa, me estoy deleitando con poesía en tu espacio, no voy a desperdiciar la invitación. y gracias por la ternura y la dulzura que por aca no viene nada mal.jejeje

Nacho Hevia dijo...

frágiles son los hilos que nos atan nuestras extremidades al centro del océano...pero quién de adentra para cortarlos?

sin más palabras para tu poema...

estoy tocado

Powered By Blogger